Imposible que pase desapercibida Teté, mide 1.76 descalza, es armónica y luminosa. Quedaría chic hasta con un batón pirineo y chancletas. Bendecida con el don de la ubicuidad, luce lujosa en el Four Seasons, fresca en su casa, atinada y juiciosa en la tele. Y a la edad en que otras empiezan a ajarse ella florece, ocupada en afianzar su pareja con Carlos Goziglia, fascinada con su nieta Sayi, conduciendo su programa en Radio Belgrano y otro en tele, con Alejandro Fantino por América.
Noticias: En “Noche de ronda” rinden tributo a figuras que ya no están en el candelero. ¿Cómo se procesa el olvido?
Teté Coustarot: No es gente olvidada, es gente valiosísima, que hace teatro o proviene de otras disciplinas, como los científicos, y no está pendiente de las luces. Y la gente del medio, que conoció su momento de gran exposición, debe trabajar mucho el ego: ahí aparece la inteligencia emocional o te vas al diablo. La fama es puro cuento, pero te da un mini poder para modificar cosas, actuar con responsabilidad, y eso no es cuento.
Noticias: Fantino es santafesino y vos rionegrina, ¿ser del interior implica una visión, un modo de vincularse diferentes?
Coustarot: Sí, hay una raíz y una mirada todavía diferentes. Somos más directos para relacionarnos y para todo. Y en televisión es muy importante la mirada de un hombre y una mujer en el mismo plano; es bueno, sin especificarlo, compartir. Alejandro es un ser absolutamente genuino. Y como él dice: “Soy alto, Teté, me puedo parar al lado tuyo” (ríe).
Noticias: En tus equipos de trabajo preguntás el signo a cada uno, ¿consultás a astrólogas?
Coustarot: Me encanta, tengo el libro de Joseph Polansky, el de Linda Goodman y en mi programa radial “La Aldea” leo sobre las Lunas. Soy fiel representante de Géminis: necesito comunicarme, contar lo que pasa, soy curiosa y estoy en todo.
Es la del medio entre tres hermanas, pero no sufrió el síndrome de la hermana-sandwich (“Fui muy feliz, no tuve ningún tipo de rollo. En realidad, tengo muy poco rollo en la vida”). Profesora de piano, jura que nunca debió agradar a las visitas tocando “Para Elisa”, pero estuvo años ensayando con el Hanon y el Czerny, los libros de escalas y ejercitación. A los 17, Stella Maris Coustarot empezó a trabajar, y nunca más paró.
Noticias: ¿La autosuficiencia es una marca materna?
Coustarot: Para mí la independencia económica fue un valor fundamental. Mamá fue maestra, directora, tengo una imagen suya totalmente independiente. Yo estudiaba Periodismo en La Plata y papá me mantenía, aunque vivía ajustadita, comía en el comedor universitario. Empecé a trabajar y era fantástico no depender de nadie. Soy una todo terreno e hice de todo.
Noticias: ¿Te daba status ser hija de la directora en General Roca?
Coustarot: No, lo que me dio una gran seguridad interna fue haber sido Reina de la Manzana a los 15 años. Nunca dejo de hacer algo por la mirada de los demás: no dudo en ir sola al cine o a un restaurante, no tengo ninguna inseguridad social.
Noticias: Te ofrecieron entrar en política: ¿en qué partido?
Coustarot: En mi provincia, en distintas oportunidades, pero no es mi vocación ni mi lugar. No vivo en Río Negro, y mi madre me inculcó la responsabilidad en todo, me asumo responsable.
Noticias: ¿Qué estilo de mujer con poder te cae mejor: Cristina, Lilita, Patricia Bullrich, Nilda Garré, Felisa Miceli?
Coustarot: No hay ninguna que me caiga peor, es interesante el camino que han hecho todas, y me merecen crédito. Me gustaría que Cristina se comunicara con más amorosidad con la gente. No creo que ella sea así, al trabajar mucho con hombres -y me ha pasado- a veces hay que ponerse una máscara.
Noticias: ¿Nuestras políticas hacen alguna diferencia respecto a sus congéneres o se mimetizan y copian lo peor?
Coustarot: La diferencia es fenomenal, si escuchamos nuestro corazón e instinto, puede haber algún cambio. Pienso en Michele Bachelet o en Ángela Merkel, la canciller alemana, que fascinó por su estilo directo y su humor. Pero este país tiene un contenido autoritario muy fuerte, habría que ver si tolera a una mujer muy femenina, tal vez haya que ponerse una coraza o ser imperativa para ser respetada. En política hay mucho machismo, ahora descubrieron que tenemos un valor electoral: desde otro lado, somos otra vez un objeto.
Noticias: Te adjudican “una fría elegancia”, ¿también es una máscara?
Coustarot: Es que la gente conocida se entrega a todo tipo de programas a contar qué le pasa y yo nunca usé los medios para mostrar un reality personal. Tengo pudor, y además esas cosas interesan para un chisme que dura cinco minutos.
Noticias: Da la impresión de que la vida te fue fácil y pródiga: ¿fuiste una sufriente alguna vez?
Coustarot: Hice bastante para que fuera fácil y pródiga. Hay gente que protesta, se queja, me pasó una vez que estaba sin pareja y decía en terapia: “Voy por Palermo y veo esas familias tan lindas, haciendo un picnic, quiero eso”. Y el terapeuta me dijo: “Teté, va a tenerlo. Pero algún día baje del auto y escúchelos, verá una cantidad de conflictos que usted no quiere tener, por eso está sola”. Es así, siempre el pasto del vecino es más verde. Bioy decía algo que me define: “Tengo una inteligencia pesimista, pero un temperamento irremediablemente optimista”.
Noticias: Susana Giménez cambió todo en los últimos 20 años, menos el peluquero, ¿se aplica en tu caso?
Coustarot: A ver… tampoco cambié a Giordano, cambié trabajos, parejas, me quedaron los afectos… sí, es una buena frase.
Noticias: A los 56, ¿una mujer está radiante porque está enamorada o porque está más relajada respecto a todo, más libre?
Coustarot: Cuando dicen “qué bien está, se nota que tiene un tipo al lado” me da cierta rebelión. El amor te pone exultante, pero estás enamorada porque estás bien. En un seminario Chopra nos hizo escribir lo que realmente deseábamos, pero no “un hombre que me quiera”: puede aparecer alguien que te quiera mal. Hay que especificar, enfocar lo que necesitás y dejar los mandatos, ¡porque después se cumple!.
Noticias: Enfocaste bien, pero te asombra haberte vuelto a enamorar “desmedidamente”. ¿El amor no es siempre desmedido?
Coustarot: Siempre, pero nuestra educación nos induce a pensar que se enamoran los jóvenes, y a mi edad, me sorprende. Siempre estuve en pareja, con intermedios de dos años, en que elaboro el duelo y no registro quien está alrededor mío.
Noticias: “Amo a Carlos porque me permite ser yo misma”. ¿Muchas veces te postergaste para no perder el afecto?
Coustarot: A lo mejor no me permitía ser tal cual era, para agradar. Creo que en la primera semana de la relación uno tiene que contar exactamente lo que es y no tratar de impresionar.
Noticias: ¿Qué es lo máximo que soportaste para no perder a alguien?
Coustarot: Situaciones de no amor. Cuando empezás a darte cuenta de que el otro no registra el dolor que te provoca determinada acción, es el momento de pensar que se rompió algo.
Noticias: ¿Sos valiente para el corte o dejás que la inercia termine el desgaste?
Coustarot: La primera vez esperé y esperé el milagro, que el otro cambie. Después aprendí y he cortado con mucho dolor.
Noticias: ¿Te enamoraste de alguien mucho más joven?
Coustarot: No, nunca.
Noticias: ¿Porqué creés que no pasó?
Coustarot: No me deben gustar, no los registro como pareja, nada, ni siquiera he tenido fantasías.
Noticias: Conocer a la gente, ¿es como abrir cajones de las cómodas en miniatura que coleccionás en tus viajes?
Coustarot: Sí, cuando dejás la formalidad salen otras cosas. Toda persona es atractiva, interesándote encontrás cosas increíbles.
Noticias: ¿Te llevaste muchas sorpresas, decepciones, traiciones?
Coustarot: Desde ya, y me cuesta aceptar la traición. Primero tiendo a justificarlo, a negarlo, me supera, después hago un corte definitivo. Me pasó con amigas y con gente con la que trabajé, serán cuatro o cinco.
Noticias: ¿Tenés un acercamiento intuitivo o racional con la gente?
Coustarot: Totalmente intuitivo, aprendí a escuchar acá (señala el plexo solar), yo era muy racional. Tengo rechazos inmediatos, y una sensación de peligro.
Noticias: ¿Cómo es Susana?, tu amiga hace 30 años, no la obvia
Coustarot: Muy transparente, ella no muestra una pose, tuvo el increíble don de poder mostrarse tal cual es permanentemente, es muy libre. La televisión es un medio muy artificial, pero ella puede abstraerse y conectarse. Es muy cálida, muy positiva.
Noticias: Ante el dolor, ¿también se conecta y cae en pozos negros o es negadora?
Coustarot: Es sumamente inteligente, enfrenta la situación y tiene una facilidad bárbara para comunicar qué le pasa.
Noticias: ¿Está bien plantada o es frágil en algún punto?
Coustarot: No, es extremadamente segura. Tiene que protegerse, el fenómeno Susana con la gente es muy impresionante, hasta con episodios raros; hace varios años pescaron a un admirador que la esperaba en el teatro con un cuchillo.
Noticias: Siempre la impactan hombres que la agasajan, que la hacen sentir el centro, ¿depende del elogio masculino?
Coustarot: Es lo que debe inspirar, Susana tiene una manera tan amorosa de relacionarse, que hay una devolución. En su casa te trae el cafecito, te sirve, está pendiente, son gestos permanentes.
Noticias: ¿Qué es lo más conmovedor que viviste con ella?
Coustarot: La muerte de su madre fue muy fuerte, ella la adoraba. Fue un momento de un dolor inmenso, inmenso.
Noticias: ¿Cómo actúa cuando estás mal?
Coustarot: Charlamos, pone la oreja, pero es muy respetuosa, tiene otras formas de preguntar cómo estás, no es invasiva. Y como se duerme tarde, podés hablar con ella hasta tarde, es muy cómodo.
Noticias: ¿Sayi es una recreación de lo mejor de tu hija Josefina y tuyo?
Coustarot: Nos supera ampliamente, es maravillosa. Tiene su carácter, y frases que me desarman, tipo: “Teti, ¿te dije que te quiero mucho”? Con ella recuperé mi capacidad de juego, me tiene absolutamente a su disposición.
Noticias: ¿Su llegada reacomodó tu relación con Josefina?
Coustarot: Sí, al verla a Jose tan madraza, tan responsable, me alejé del papel de madre marcándole cosas. Tiene buenos valores, me siento tranquila.
Noticias: ¿Por qué te habías desconectado de tu capacidad de juego?
Coustarot: Cuando no tenés un chico cerca es difícil; Sayi tiene muchísima fantasía, escribe cuentos, arma historias, son momentos de mucha conexión.
Noticias: Géminis es como un niño que juega, descubre el mundo y vincula gente. ¿Recuperaste tu esencia?
Coustarot: Totalmente. Y con un nieto uno está tan relajado, tan poco preocupado por enseñar… Es una relación única.