Delatan buena química. Viven juntos, trabajan juntos y se ríen de sí mismos. Andrea Campbell y Pablo Novak se enamoraron hace 9 años, tienen dos hijos (Marcos -4- y Esmeralda -1 año y medio-) y comprobaron que la energía que entre ellos circula, también da rédito en la radio. Tras probar el verano en la Costa, apostaron a que “Family Day”, por FM La Isla, les traería la misma gratificación.
Sentados en los sillones del Hotel Sofitel, mirada cómplice mediante, se olvidan del grabador y se explayan a sus anchas sobre los temas que les interesa. “Uno es el abismo conceptual que existe entre nosotros”, adelanta Pablo.
Andrea Campbell: A él siempre le gustó la soledad y yo nací con novio, le puse el frac al primer estúpido que se ponía adelante y lo imaginaba como creía que tenía que ser un novio, muy distante a lo que realmente era. Me he pegado cada golpazo… Y cuando acepté salir con Pablo…
Pablo Novak: La invité a los 20 y aceptó a los 30, se tomo 10 años para pensarlo.
Andrea: No puedo entender cómo pudo estar tantos años solo. Él dice que estuvo solo, pero en el ínterin salió con fulana y mengana. Si salís dos meses estás de novia.
Pablo: Nunca salí dos meses. Fueron años o días. Curtir con alguien es estar solo. Vos te ganaste el mote de novia, la que uno presenta a su familia.
Noticias: ¿En qué otros temas no se ponen de acuerdo?
Pablo: El concepto de mina de 30 y el tipo de 30. La mina quiere enganchar, el tipo pe pe pe pe… A las amigas de Andrea les aconsejo que se busquen uno de 50. A mis amigos les digo que la estiren todo lo que puedan
Andrea: ¡Mirá lo que dice! Una mujer de 30, 40 y 50 está espectacular, y el de 50 casi arruinado.
Noticias: Parece que fuiste un duro de “cazar”…
Pablo: Tuvo que hacer un esfuerzo sobrehumano para engancharme.
Andrea: Callate, si me grababas para verme en la tele.
Noticias: Si en el programa hablan de estos temas, ¿de qué discuten en casa?
Pablo: De lo mismo, pero más acalorado: pueden llegar a volar ceniceros.
Andrea: Hablamos de trabajo, cuando los chicos nos dejan. Marcos interrumpe y Esmeralda reclama atención. El chiste es que dentro de 25 años, cuando podamos sentarnos a charlar, nos vamos a preguntar cómo está tu vida (risas).
Pablo mamó la música desde que su padre, Chico Novarro, le transmitió su pasión, algo que su hijo canalizó a través de sus propios acordes; pero su vocación también se disparó hacia la actuación. ¿Por qué la radio? “Porque es donde puedo ser yo mismo”, admite. Andrea se fue de las pasarelas y, para perfeccionar su rol de conductora, estudia Periodismo. “La técnica de la entrevista no la tenía. Además, soy madre, esposa, y esas cosas te chupan tiempo. Estudiar es interesante”, justifica.
Noticias: Se te cuela un tinte machista, Pablo…
Pablo: A veces sí. Me gusta bancar la casa; no puedo soportar si un mes a ella le va mejor. Es un problema, necesito ganar más que mi mujer.
Noticias: ¿Por qué?
Pablo: Me gusta ser el hombre de la casa. Es contradictorio: no me busqué una mina sumisa, sino una que tiene un torpedo en el culo y que no para de laburar. En un punto me gustaría tener una geisha, algo que ella me vendió. Compraba aceites para hacerme masajes, después se fueron espaciando y ahora los masajes me los hace Sergio (risas). Con el tema sexual también soy re machista. No me gusta una Moria Casán, muy fálica. No podría ser juguete sexual de nadie.
Andrea: Si yo hubiese sido sumisa, nunca hubiera llegado a nada en mi carrera. Tenés que poner el cuchillo entre los dientes y avanzar. Y eso nos trajo conflicto trabajando juntos, porque él esperaba a su mujercita de entrecasa, y en el trabajo no soy así.
Pablo: ¡Es una hincha pelotas! Pide una cosa y la quiere ya.
Andrea: ¿Sabés qué pasa? Entramos a casa, yo cargando a los dos chicos y le digo abrí la puerta y prendé la luz. Y me contesta que no puede hacer dos cosas al mismo tiempo. Tenemos tiempos distintos…
Pablo: Sí, a veces hacemos el amor mientras ella duerme (carcajadas).
Andrea: Yo hago todo y él va haciendo a sus tiempos. Soy una boluda, porque como creo que lo voy a hacer más rápido y mejor, él no hace nada.
Pablo: Toda la vida quieren hijos y cuando los tienen, esas actividades molestan. Yo quería hijos, pero Andrea tenía otro apuro.
Andrea: Él respetó mi reloj biológico. Pablo quería hijos después de los 45 y fue un tema de su terapia…
Pablo: Sí, ella le puso dinero a mi terapeuta (risas).
Noticias: ¿Es cierto que construían muebles rústicos y tuvieron un local de restauración?
Pablo: Sí, y mi mujer, que tiene un coete en el culo, mañana va a querer exportar caléndulas…
Andrea: Exporté en grande. Fabricaba cinturones que vendíamos a Holanda, Bélgica y Alemania. Con los muebles teníamos un showroom y se transformó en una empresa familiar con mi mamá.
Pablo: Yo me bajé enseguida, soy cero comerciante. Un actor tiene muchos altibajos y sueña con tener el quiosco que le genere dinero. Conclusión: prefiero producir cosas vinculadas con lo artístico.
Andrea: Vengo de una familia en donde la cosa bohemia de trabajar seis meses y estar dos meses parado, no existe.
Noticias: ¿Quién lleva los pantalones?
Andrea: Él dice que yo y yo digo que él. Soy bastante visceral, exploto; pero él calladito, calladito… Soy mucho más flexible, en todo.
Noticias: Llevan 9 años juntos, ¿fue difícil superar la comezón del séptimo?
Pablo: Estaba paranoico con eso. Pensaba que el hombre tenía una cantidad de cartuchos para usar con cada mujer. Soy el típico caso de padres separados, no creía que se podía durar tanto. Y ahora me decís 9 años, ¡más de dos mundiales! (carcajadas).
Andrea: En los momentos de crisis él se va al comedor a ver cómo hace para alquilarse un departamento.
Pablo: Cada vez que nos peleamos pienso eso y ella viene como si nada. Siempre viene al pie.
Noticias: ¿Qué idea tienen de la infidelidad?
Pablo: Bueno… ella nunca se enteró (risas).
Andrea: No me la banco, pero creo que no me separaría por una sola infidelidad, tampoco le digo andá y divertite.
Pablo: Como Andrea me da para tener una sola, me estoy tomando tiempo para elegir con quién (ríe).
Noticias: ¿Vos le darías a Andrea una oportunidad?
Pablo: Sufriría muchísimo y después la cago a trompadas.
Andrea: ¿Me dejarías, por una sola vez?
Pablo: ¿Quién te puede gustar más que yo? La tengo bien atendida, además no creo que sea así… una atorranta.
Noticias: ¿Por qué una mujer infiel es una atorranta?
Pablo: La mujer recibe y el hombre va y mete. Mirá los animales. ¿Has visto vacas infieles? Bueno… yo admití que era machista.